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Un reto para maestros clases en línea

(Este programa es público, ajeno a cualquier partido político. Queda prohibido el uso para fines distintos a los establecidos en el programa)


Nuevo Laredo.- El ciclo escolar del 2019-2020 fue atípico, ya que por la pandemia del Coronavirus tuvo qué finalizarse en línea, en todos los niveles, tanto preescolar, como estudios superiores.

Esto ha representado un reto para los docentes, de escuelas públicas y privadas, ya que muchos no tenían conocimiento de la tecnología, mientras otros no tenían alcance a esta.

“Complicado, pero a la vez fue un reto aprender nuevas técnicas, aprendimos a darle un verdadero uso a las redes sociales que fue lo que nos vino a salvar para tener una mejor comunicación con los niños”, comentó Susana González, docente de jardín de niños particular.

En ese punto, Laura Martínez, maestra de secundaria pública, coincidió que gracias a la tecnología se pudo rescatar parte del año.

“El uso de las tecnologías fue un recurso emergente para sacar adelante lo que restaba del ciclo escolar. Lo conveniente de ello fue que se podían seguir impartiendo los contenidos a pesar de la distancia”, comentó.

Si bien, entre las ventajas está que los estudiantes y maestros pasan más tiempo en sus hogares, esto también trae severas desventajas.

“Desafortunadamente, muchos alumnos (aún teniendo el recurso y la tecnología a la mano) decidieron ignorar las clases: muchos de ellos solo entraban a las plataformas para hacer bromas y comentarios fuera de lugar. Incluso llegué a detectar alumnos de otras instituciones de nivel preparatoria que ingresaron a la clase virtual para hacer uso indebido de la misma”, dijo Laura Martínez.

Por su lado Susana González comentó que una desventaja que se tiene es que los padres no tienen la misma disposición, ya que no todos trabajan desde casa, además que no todos los profesores cuentan con un espacio adecuado en sus hogares para dar las clases.

“La disponibilidad de tiempo por parte de los padres de familia, ya que no todos están en homeoffice, algunos siguieron trabajando su horario normal y hasta en la noche podían dedicarle el tiempo a los niños de ver las actividades que se les habían asignado”, dijo González.

Laura Martínez indicó que entre las desventajas también está la falta de recursos de algunos alumnos y maestros para poder acceder a las clases virtuales, ya que en su caso trabaja en una escuela pública.

“Me tocó saber de muchos alumnos (incluso maestros) que no contaban con el equipo adecuado tanto para recibir el material digital, como para prepararlo, lo que hizo prácticamente imposible la comunicación para desarrollar las clases”, agregó.

Ambas coincidieron en que es necesario una capacitación adecuada para los maestros, ya que es primordial tener herramientas para sacar adelante sus clases.

Y es que si bien, cada nivel escolar tiene sus retos, lo cierto es que esta nueva realidad ha traído este tipo de situaciones complejas para resolver.

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(Este programa es público, ajeno a cualquier partido político. Queda prohibido el uso para fines distintos a los establecidos en el programa)