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CRONICAS POLITICAS

(Este programa es público, ajeno a cualquier partido político. Queda prohibido el uso para fines distintos a los establecidos en el programa)


 Una obsesiva compulsión recaudatoria

Por Alberto Guerra Salazar

CIUDAD VICTORIA, (ASI).— Un digno cierre de año: Cabeza de Vaca permanece ausente de la escena pública y sus colaboradores más cercanos destrozan la imagen de su gobierno con acciones y conductas impropias de personas que no solo deben ser honestas, sino parecerlo.

Pero ese no es el problema; el problema es que ningún segmento de la sociedad tamaulipeca parece preocuparse de que los servidores del gobierno estatal, panista, estén convertidos en energúmenos, bárbaros, rústicos, soeces, violentos, incultos, peligrosos.

Diputados locales del PAN montaron la farsa de elegir a un forastero como fiscal general de Tamaulipas para los próximos siete años, pero ningún foro de abogados alzó la voz para reclamar que estaban entregando el cargo a un inepto, un incompetente, un incapaz, para decir lo menos del señor Irving Barrios Mojica.

Todos parecen tenerle miedo a la capacidad de represión del gobierno y aceptan con resignación y cobardía, que les tomen el pelo, los burlen, engañen y los despojen del elemental derecho de disentir, impugnar, resistir, protestar y contradecir.

El sindicato de profesores tiene los pantalones en los tobillos y no se atreve a defender con la energía que se necesita, a sus agremiados que sufren la retención de salarios desde hace mucho tiempo.

El comercio organizado, los agentes aduanales, el propio gobierno federal, toleran que funcione una aduana en la Y de la carretera Victoria-San Fernando, instalada por el sub-secretario de ingresos Arturo Soto Alemán.

El director estatal de la policía de la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas, sorprendido en extrema condición etílica en la vía pública, permanece trabajando en la dependencia, pese a que puso en riesgo la vida de inocentes cuando se resistió al arresto, armado.

El secretario interino de la SEBIEN estatal fue identificado por su nombre en una investigación del IETAM como responsable de entregar despensas en Río Bravo a cambio de votos, en el proceso inmediato anterior, pero sólo mereció del árbitro electoral, una amonestación pública.

Una sub-secretaria de educación y su acompañante protagonizaron una reyerta con otras personas, en la vía pública, a deshoras, con el resultado de un herido con arma blanca.

Una instrucción oficial superior mantiene a ambos funcionarios protegidos del escrutinio público, para que no se conozca masivamente su falta y conserven sus cargos, en una dependencia encargada de educar niños y jóvenes en valores y virtudes.

Esos son apenas algunos episodios que caracterizan a la gestión de este gobierno estatal, panista, donde además impera la opacidad, el distanciamiento con la sociedad, la falta de respeto a las normas básicas del servicio público.

Otra insana peculiaridad del binomio ejecutivo-legislativo, es el desmedido apetito por los ingresos fiscales, de donde sea, como sea, cuando sea, a través de impuestos, derechos, alcabalas, gravámenes, contribuciones, etcétera.

Dos promesas de campaña de los candidatos del PAN en 2016, es que no iban a crear nuevos impuestos ni aumentar los existentes, y que no contratarían más deuda pública.

Eran mentiras, por supuesto. El impuesto sobre nóminas subió en una proporción del 50 por ciento, y se restableció el impuesto sobre hospedaje. El impuesto sobre tenencia de vehículos, que fue combatido durante la campaña electoral panista, siguió vigente durante los dos primeros años del sexenio de los vientos del cambio.

Luego intentaron crear un impuesto para vehículos extranjeros sin documentos de internación al país. Casi la pegan, pues el decreto fue promulgado pero nunca aplicado, pues hubo contra-marcha por razones jurídicas.

Ahora inventaron derechos por apertura de casinos (que incluye moches disfrazados) y otros por el funcionamiento de casas de empeño. Los genios de la sub-secretaría de ingresos se devanaron los sesos en descubrir un nuevo modo de cobrar dinero y gritaron Eureka.

Pero el gusto duró poco, pues hicieron firmar a Cabeza de Vaca la iniciativa de ley para patentar una ley dizque para regular el flujo de extranjeros con vehículos en tránsito, pero alguien les hizo el favor de avisarles que estarían orinando fuera de la olla.

El decreto fue congelado en la obediente bancada parlamentaria del PAN, pero se trataba de hacer pagar a extranjeros que cruzan de Estados Unidos hacia México, vehículos de deshecho, con destino a sus países de origen, en Centroamérica.

Según el documento, redactado en términos poéticos, casi un cuento de hadas, los choferes extranjeros pagarían más de dos mil pesos por diferentes motivos, pero todo en beneficio de ellos mismos, los tamaulipecos, el medio ambiente, la seguridad pública.

Son caravanas de centroamericanos que compran como yonques vehículos vetustos en Estados Unidos, enganchan hasta tres unidades y los conducen por la carretera de la frontera hasta el entronque Los Rayones, donde toman camino rumbo a Tampico.

Quieren hacerlos pagar en oficinas fiscales de la frontera: 1, empadronamiento de cada vehículo; 2, holograma y/o engomado, 3, certificado de no contaminar el aire, 4, certificado de no robo, 5, contratación de seguros contra daños a terceros.

Los autores del texto aseguran que los dineros resultantes del pago de estos derechos, se gastarán en mantenimiento de las carreteras tamaulipecas y la construcción de paraderos o estaciones confiables y seguros, para descanso de los choferes y sus familias.

Es un burdo asalto en despoblado porque se trata de extranjeros que hacen su recorrido por el territorio tamaulipeco en un solo día, desde el cruce internacional estadounidense, hasta Tampico.

Desde que entran a Tamaulipas, hasta su destino porteño, van repartiendo sobornos entre policías federales, la aduanita de Arturo Soto Alemán, agentes viales citadinos y policías estatales.

Hay otro decreto más siniestro todavía, pues se trata de que empleados del gobierno estatal identificarán los terrenos tamaulipecos en aparente abandono, para reclamarlos como propiedad pública.

Y ya se sabe, el que parte y reparte, se queda con la mayor parte. Esta terrible obsesión gubernamental por conseguir vías de ingresos de dinero da mala espina. Mañana le seguimos con el tema.

Ayer, José Ramón Gómez Leal y los ocho sub-delegados regionales tamaulipecos, participaron en una reunión en la Ciudad de México, con el Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, con el tema Encuentro Nacional para la Construcción de Paz y Seguridad.

También ayer, López Obrador presidió otra reunión sobre la nueva política de salarios mínimos, donde confirmó que la frontera tendrá desde enero de 2019, el beneficio de doble salario mínimo y un trato fiscal preferente, con IVA del 8 por ciento e ISR del 20 por ciento.

Los detractores del gobierno de MORENA propalaban con singular alegría, que AMLO no cumpliría esos compromisos de campaña, pero se van a morir de coraje.

En la nota roja tenemos el episodio de otro pistolero abatido en Reynosa en circunstancias extrañas, pues el cadáver apareció varias cuadras distantes de un vehículo Cherokee volcado.

Adentro de la camioneta estaba una joven mujer atada de manos y pies y con los ojos vendados, presuntamente, secuestrada. El joven sicario muerto tenía cerca una metralleta.

Y en la salida a Monterrey, a pocos metros de un retén militar-policiaco, descubrieron una camioneta con el cadáver de un hombre adentro y cuatro personas amarradas.

Rueda en redes sociales la versión de un supuesto levantón de un ex Sub-procurador de Justicia de Tamaulipas, proveniente de la PGR como Irving Barrios.

Cumplen años el periodista de Nuevo Laredo Abisai Rubio y el joven Aaron Alejandro Almanza, junior de Julio Almanza Armas, presidente de la FECANACO.

Correo electrónico: albertoguerra65@hotmail.com

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