Mientras organizaciones sociales, campesinas y de supuesto apoyo familiar, comercian con placas para automóviles de procedencia extranjera, el servicios de administración tributaria no tiene un registro legal del pago de impuestos de estas instituciones aun cuando obtienen un lucro por el pago de entre 1,500 y 2,500 pesos por el par de laminas, desconociéndose a la fecha cuantas han vendido durante los más de 10 años que tienen ofreciendo una nacionalización para los vehículos que han emplacado.
Yadira Mendoza Delgado, administradora local del SAT en Matamoros, dijo que todas la personas y organizaciones que estén percibiendo un ingreso por las actividades que realizan están obligadas a pagar impuestos, de tal manera que las organizaciones campesinas y de protección a la familia no están excluidas de dichas obligaciones.
“Todos los contribuyentes que tengan cualquier tipo de ingresos, están obligados a declarar un impuesto; en este caso no se realmente el giro que ellos estén tomando, pero en caso de estar percibiendo un ingreso deben de contribuir y pagar un impuesto”, indicó.
Y aun cuando debe de existir un registro en el sistema de la autoridad hacendaria en cuanto a los pagos de impuestos que hacen las organizaciones por cada placa de 1,500 y 2,500 pesos que venden a personas bajo la promesa de nacionalizarles sus vehículos, el SAT no tiene identificados esos pagos de impuestos, lo cual deja claro que los trámites de esas organizaciones campesinas no se han legalizado ante Hacienda.
“No tenemos información especifica de esos grupos, no los tenemos identificados”, aseveró.
La Verdad
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