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No era bullying, estaban jugando

(Este programa es público, ajeno a cualquier partido político. Queda prohibido el uso para fines distintos a los establecidos en el programa)


Mucho se ha hablado del bullying pero poco se ha hecho para combatir o al menos las acciones emprendidas no han resultado suficientes para erradicarlos de los planteles educativos.

La violencia se ha incrementado en las escuelas se puede apreciar en los muchos videos que hay en YouTube, porque hasta eso los chamacos les gusta presumir como vapulean a sus compañeros ¿y los padres y los maestros donde están?

Ante esto se han presentado casos, en otros estados de la republica en la que menores de edad han llegado armados a los planteles educativos en un afán de defenderse de aquellos que los acosan, pero lamentablemente el bullying ya cobró su primera víctima dentro de una escuela en Tamaulipas.

Un menor de 12 años estudiante de la secundaria Numero 7 de la capital del estado resultó gravemente herido cuando cuatro de sus compañeros le practicaron el llamado “columpio” y lo peor del caso es que fue ante la presencia de su maestra y esta no hizo nada al ver lo que estaba sucediendo pese a los gritos del menor que le pedía que interviniera y detuviera a los chamacos abusivos y que luego de que el menor sufriera un fuerte golpe en la cabeza al pegar contra la pared y luego contra el suelo este no fue atendido, como debió ser, siendo hasta que el menor llegó a su casa acompañado de su hermana y de un conserje que le dio “raid” y que lo dejó en la banqueta de la vecindad, pese a su condición el menor le alcanzó a decir a su madre como sucedieron los hechos y el nombre de sus compañeros le aplicaron este “juego”.

Lamentablemente luego de permanecer grave en el hospital infantil el menor perdió la vida ante la desesperación de sus padres que exigen castigo para los responsables, así como para la maestra y la subdirectora que nada hicieron para evitar esta tragedia.

En tomas realizadas por noticieros televisivos se aprecia como la madre del menor encara a las autoridades educativas cuando estas le decían que los menores estaban jugando a lo que la mujer airadamente les reclama que cual juego si su hijo le gritaba a la maestra que les ordenara que lo dejaran en paz.

Las autoridades de la SET prometen investigar aunque aquí debe proceder la instancia judicial porque esto no deja de ser un homicidio imprudencial.

Lamentablemente nos platican madres de familia que en algunas escuelas públicas el quejarse por estos casos es como no hacerlo ya que empezando por los maestros estos se hacen de la vista gorda y como cuentan con plazas federales pues no hay quienes les exijan que metan orden entre los menores.

El bullying siempre ha existido antes se le conocía como “carilla” pero el proceder de los maestros la mayoría de las veces siempre es el mismo no hacen nada para ellos es más fácil cerrar los ojos y hacer como que no pasa nada aunque ello signifique un grave daño psicológico para el menor abusado.

En las instituciones privadas no ha faltado aquella en la que directivos al recibir quejas de padres de familia por el acoso que sufren sus hijos se han limitado a decirles “si no les gusta hay muchas otras instituciones donde pueda estudiar su hijo”. Porque de que las hay las hay.

La descomposición social que estamos viviendo ha propiciado que se incrementen los casos de bullying poco se puede hacer con la llamada Escuela para Padres ya que son pocos los que participan en ella y quiénes son los progenitores de aquellos menores que acostumbran a acosar a sus compañeros son quienes menos asisten a este curso.

Es hora de que las autoridades coordinen acciones para implementar nuevas estrategias que ayuden a evitar que se pueda presentar otra víctima como en el caso del jovencito de la Secundaria 7 de Ciudad Victoria, por lo pronto los maestros que pudieron evitar la tragedia ya fueron separados de su cargo mientras que los padres del menor presentaron la denuncia por la muerte de su hijo.

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guerragris@hotmail.com

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