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AL VUELO-Maniquí

(Este programa es público, ajeno a cualquier partido político. Queda prohibido el uso para fines distintos a los establecidos en el programa)


Por Pegaso

Estaba yo descansando muellemente en mi cumulonimbus favorito, enterándome desde acá arriba de los desencuentros y sinsabores entre autoridades estatales y municipales en una situación que amenaza con un dèja vu, un volver a revivir aquel año de 1999 cuando el entonces Gobernador Tomás Yárrigton sacó de la Presidencia Municipal al alcalde electo Luis Gerardo Higareda Adam. (El tiempo es una rueda de la fortuna y hoy Yárrington es un perseguido de la justicia, mientras Higareda vive como un tranquilo empresario en el Valle de Texas).

Pero decía que estaba descansando en mi mullida nube cuando ví en la pantalla de mi computadora algo que me dejó perplejo, estupefacto y anonadado: Un video donde un grupo de personas parecen congeladas y no se les mueve un solo pelo.

El video toma varios planos y hace un paneo general para mostrar que, efectivamente, aquella gente permanece estática.

A esa nueva moda, a esa nueva locura la llaman «el reto maniquí», o en inglés «mannequin challenge».

Les juro que yo, como Pegaso humanista que soy aún creo en mis semejantes. Pienso sinceramente que la evolución ha trabajado maravillosamente en nosotros para proporcionarnos una herramienta valiosa, como es el cerebro, centro de la actividad intelectual y emotiva de nuestra especie, ¿y me salen con ésta estupidez?

Cristiano Ronaldo en calzones, Hillary Clinton congelada en campaña, miles o millones de idiotas que se suman a esta sinrazón. ¿Qué es lo que sigue después?

Yo recuerdo que hace poco más de un año llegaba alguien por atrás de uno y le vaciaba sin más ni más una cubeta repleta de agua con cubos de hielo, y a eso se llamaba «El reto de la cubeta de agua fría».

De aquí en adelante ya nada debe sorprendernos porque somos tan proclives a seguir las tendencias que dictan los demás, como el perro de rancho que ladra porque los demás están ladrando, aún cuando no sepa el motivo.

Casi me arrancaba los pelos cuando veía en las calles, en los parques y jardines una bola de zombis con su teléfono celular buscando pokemones. ¿Es que no tenemos otra cosa mejor qué hacer?

Propongo retos más instructivos y de mejor provecho para la comunidad, por ejemplo, «el reto de ir por la calle recogiendo la basura y poniéndola en su lugar», «el reto de conducir correctamente sin pasarse un alto», «el reto de ayudar a nuestros semejantes que están en gran necesidad» o «el reto de ser amable con todo el mundo».

¿Y en qué consiste el dichoso «reto maniquí»?

Pues en que alguien propone, cámara en mano, filmar a los presentes en una posición chistosa, original o solemne sin mover un solo músculo, totalmente congelados como si se tratara de maniquís.

No sé qué persona sin quehacer lo inventó, pero es una estupidez que se ha hecho viral en las redes sociales.

Y para demostrar que se trata de una de las más soberanas idioteces que ha inventado la humanidad en los últimos cien años, me propongo hacer el «reto maniquí» en las siguientes circunstancias:

1.- Si en alguna ocasión me para un retén militar para revisar mi coche en busca de armas o mariguana, les pediré un minuto para llevar a cabo el reto.

2.- Cuando vea en la calle una balacera, correré con mi cámara para pedirles a los narcos y a los policías que participen en un «reto maniquí».

3.- En un evento, durante la toma de protesta de algún pomadoso comité, les haré la propuesta para que se queden un rato con la mano extendida y la expresión solemne de la cara.

4.- A los miembros del Cabildo, cuando estén inmersos en peliaguda discusión.

5.- A los compañeros periodistas que acostumbran estirarse lo más posible para alcanzar a grabar lo que dice el funcionario al que están entrevistando
en bola.

Estoy seguro que todos ellos accederán a cumplir con éste reto porque es chistoso, divertido y novedoso.

Por lo pronto, los reto a leer el dicho estilo Pegaso: «A la tendencia, individuo al que le ajusta perfectamente». (A la moda, el que le acomoda).

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